Hay al menos 140 millones de personas en el país que se ven afectadas por las injusticias entrelazadas del racismo sistémico, la pobreza, la devastación ecológica, el militarismo y la falsa narrativa del nacionalismo cristiano. La Campaña de los Pobres cree que la lucha noviolenta tiene el poder de poner fin a estas injusticias, cambiar la narrativa de la vergüenza o culpa individual a las causas fundamentales sistémicas y transformar nuestra sociedad.
Este Pacto de No Violencia se basa en lecciones de movimientos sociales noviolentos históricos y nuestras experiencias en la construcción de esta Campaña. En todas nuestras actividades, eventos y acciones, buscamos defender los siguientes principios:
- Actuaré con respeto hacia todos. La noviolencia es una forma de vida para personas valientes. Es una resistencia activa a las injusticias entrelazadas que enfrentamos todos los días. Requiere presencia de ánimo y un profundo compromiso moral y espiritual para acabar con la injusticia. Mantendré mi presencia de ánimo y caminaré con dignidad en mis acciones.
- Le diré la verdad al poder. La noviolencia busca ganarse la amistad y la comprensión. Confrontaré a aquellos que no estén de acuerdo con nuestra posición usando gracia, inteligencia, verdad y compasión y nunca comprometeré mis principios.
- Buscaré derrotar a la injusticia, no a las personas. La noviolencia reconoce que todos somos afectados por las causas fundamentales sistémicas de la injusticia. No humillaré a mi oponente, sino que invocaré lo bueno que hay en ellos y los desafiaré a ellos y a nuestra sociedad a vivir a la altura de nuestro verdadero potencial.
- Aceptaré las consecuencias de mis acciones por la justicia. La noviolencia nos prepara para aceptar las consecuencias de nuestras acciones sin represalias y para no responder violentamente ni siquiera a los actos de violencia.
- No resistiré el arresto, usaré lenguaje hostil o insultos, no portaré ni usaré armas ni haré amenazas de violencia.
- Caminaré enamorado. La noviolencia resiste la violencia tanto del cuerpo como del espíritu y exige que amemos a nuestro prójimo. El amor de la noviolencia es activo, espontáneo, desinteresado y generoso, dando de buena gana incluso cuando puede ser devuelto con hostilidad.
- Puedo usar una mascarilla para mi salud y seguridad y la de los demás. Sin embargo, no obstruiré mi capacidad de contar mi historia sobre por qué el PPC es importante para mí de manera pública y accesible.
- Creo que el universo está del lado de la justicia. La no violencia tiene sus raíces en la creencia de que la justicia finalmente vencerá a la injusticia. Toda la historia nos está moviendo en esta dirección.
- Estoy comprometido con un movimiento, no con un momento. Los cambios que buscamos requieren largas jornadas de trabajo, fuerza, valentía, creatividad y compromiso con un esfuerzo que va más allá de cualquier individuo. La noviolencia nos obliga a actuar en comunidad, a aprender con y de otros, a construir una unidad de fusión a través de las líneas de división, incluida la raza, etnia, clase, orientación sexual, estado de inmigración y documentación, género e identidad de género, y a priorizar el liderazgo y demandas de los más afectados por las injusticias a las que nos enfrentamos.
Al comprometerme con estos principios, aprovecharé el poder y la fuerza del alma que existe dentro de cada uno de nosotros.. Me basaré firmemente en la no violencia como filosofía, práctica y disciplina moral y espiritual. Me esforzaré por encarnar los valores de coraje, inclusión, justicia, verdad y amor por todos los que me conectan con cada ser humano.